El poliestireno expandido causa graves daños en los ecosistemas acuáticos ya que afectan a los aparatos digestivos y actúan como absorbentes de sustancias nocivas que pueden intoxicar a los animas que lo digieren. Asimismo, los disolventes de la industria química son carcinoxénicos y una solución contra lo vertido al medio ambiente pose ser la reutilización en impermeabilizantes o pegamentos.